Educar en la sociedad digital

Mariano Jabonero BlancoEl sistema educativo no podrá afrontar sus retos a menos que apueste por el uso de la tecnología.Según el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital, España es el segundo país de la Unión Europea con mejores servicios públicos digitales y el quinto con mejor conectividad. Madrid y Barcelona se sitúan entre las 10 ciudades europeas en las que han nacido más startups digitales. España, según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), está entre los países líderes en gobierno digital y, según otros informes, es el séptimo país en infraestructuras de innovación.Estos y otros datos son muy buenas noticias, que debemos poner en contexto, contrastar con la realidad cotidiana del país y prever su evolución futura. En primer lugar, al igual que ocurrió con el ferrocarril o la electricidad en el siglo XIX, es preciso contar con unos raíles o tendidos eléctricos comunes que permitan implementar políticas públicas o comerciales articuladas de economía digital. Es decir, contar con un ecosistema propio que evite la dispersión de iniciativas públicas y privadas. La dispersión imposibilita beneficiosas sinergias y reduce la magnitud de los impactos internos y externos.En segundo lugar, es preciso universalizar el acceso a la tecnología y a la digitalización (T+D): quizás llegó el momento de pasar de hablar de TIC, para hacerlo de T+D, una universalización que no solo se justifica por obvias razones de justicia social sino, además, como requisito para un desarrollo sostenible en el contexto de la cuarta revolución industrial y en la era de la inteligencia artificial. De acuerdo con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la falta de conectividad no es solo una barrera tecnológica, sino también lo es para el acceso a la salud, a los servicios sociales, a la educación, al trabajo y a la economía en general.A principios del actual milenio cobró protagonismo en las prioridades de política exterior la nueva agenda de seguridad en la que, junto con asuntos geopolíticos más o menos clásicos, se incluyeron otros como los relacionados con el cambio climático o las pandemias. Pues bien, de acuerdo con lo que venimos exponiendo, consideramos que hoy la diplomacia digital es una prioridad, como consecuencia de la utilización creciente de sistemas virtuales para las informaciones, negociaciones y toma de decisiones estratégicas de política exterior. Sin prescindir de la necesaria actividad...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR