Los jóvenes, sin acceso a salud y educación por desplazamiento forzado

SaraíAlasEl desplazamiento forzado interno afectó el acceso a la salud y la educación de adolescentes y jóvenes salvadoreños entre los 12 y 18 años, situación agravada por la crisis sanitaria causada por el covid-19, reveló un informe presentado ayer por las fundaciones Cristosal y Educo.El estudio cualitativo denominado "Desplazamiento interno y COVID-19: su impacto humanitario en la vida de niños, niñas y adolescentes y sus familias", señaló que la emergencia por el covid-19 empeoró la situación de desplazamiento forzado interno, pues impidió el acceso a servicios médicos, causó suspensión de jornadas sanitarias municipales, generó afectaciones a la salud mental e incrementó la violencia intrafamiliar tras la imposición de la cuarentena.Según el informe, se evidenció la dificultad de acceso al servicio de salud, no solo por la falta de especialistas, sino por la saturación del sistema público. Las familias de escasos recursos, además, incurreron en más gastos para trasladarse fuera del municipio en que viven para acceder a la cobertura médica establecida por el Ministerio de Salud (MINSAL).La consultora del proyecto, Francesca Buccioni, señaló que no existe una atención específica para la salud a familias en condición de desplazamiento forzado interno. Según la especialista, son las mismas organizaciones de la sociedad civil y las municipalidades quienes han asumido el rol de organizar jornadas médicas."Se evidencia cómo al necesitar una atención especializada hay una dificultad de acceso al servicio de salud", explicó.Buccioni señaló que los adolescentes y jóvenes en condición de desplazamiento forzado también enfrentaron dificultades para acceder a la educación.El estudio advirtió que durante el cierre de las escuelas para evitar los contagios, incrementó la brecha digital. "La condición de desplazamiento forzado no es el único factor que pone en riesgo el acceso al sistema educativo, agravando esta situación se suma el contexto de la pandemia por covid-19. El cierre de las escuelas dejó una carga de estrés para los jóvenes y sus familias, tanto en lo económico como en el aprendizaje", según el documento.Los adolescentes y jóvenes en condición de desplazamiento no tenían computadoras o dispositivos móviles para acceder a la modalidad virtual. También hubo dificultad para pagar un paquete de internet mensual.Por otro lado, la directora de investigación en derechos humanos de la fundación Cristosal, Rina Monti, señaló que el...