Mujeres emprenden con artesanías de barro negro

Alfredo RodríguezSantos Cecilia Guerrero Ayala, de 30 años; Zoila Maritza Ayala Flores, de 37, y Natividad de María Luz Ayala, de 50, son reconocidas alfareras del caserío La Ermita, cantón San Nicolás, de Apastepeque, en San Vicente, que convirtieron el arte en barro negro en la forma de conseguir los recursos económicos para cubrir las necesidades de sus familias.Son mujeres de escasos recursos económicos pero muy valientes y creativas que gracias al esfuerzo adquirieron las herramientas para sus talleres y elaborar comales, adornos y ollas de barro negro.Natividad, la mayor de todas, aseguró que este oficio le permitió "sacar adelante" a sus cinco hijos, quienes se han convertido en un apoyo en este arte. "Trabajo el barro negro de forma manual, no tengo torno, hago comales pequeños, medianos y grandes de hasta 1.10 metros y ollas . El barro lo traigo en un terreno de un familiar y después consigo los demás materiales", dijo la mujer.A 500 metros al oriente de la casa de Natividad, se encuentra la vivienda de Zoila, quien actualmente tiene mayor inventario debido a los pedidos que le hacen comerciantes de Ilobasco, en Cabañas.Esta artesana trabaja el barro blanco, elabora ollas, platos llanos, hondos para sopas, arroceras y macetas, entre otros.Su horno artesanal está ubicado frente a su casa y ocupa leña para quemar el barro, es la única que ha creado su marca bajo el sello de Alfarería San Nicolás, en honor al cantón de residencia."Tengo 19 años de trabajar la...