La primera consulta dental del niño,

Beatriz MenjívarLa salud oral inicia en la etapa del embarazo de la madre. En este periodo, la persona profesional a cargo puede iniciar también la orientación y motivación en el cuidado de la salud bucal del bebé, así como la importancia de la lactancia materna exclusiva para su salud oral y sugerirle las visitas tempranas al odontopediatra."La etapa de embarazo es momento para orientar y motivar a cuidar la salud oral del bebé. La primera visita al odontopediatra, aun cuando al bebé no le han erupcionado los dientes, puede ser a los cuatro meses para tener una evaluación temprana de su estructura oral y detectar cualquier alteración, se revisa el frenillo, si presenta dientes natales, que son los que trae al nacer; o neonatales, que son los que nacen en los primeros 30 días de vida. Se puede detectar cualquier alteración a la vez que se establece un acercamiento con el bebé", indica Maritza Menjívar Dubón, odontopediatra y docente de la Universidad Evangélica de El Salvador (UEES).En relación a la cantidad de pasta para el cepillado Menjívar Dubón recomienda, "si tiene entre uno y ocho dientes puede usar la cantidad de pasta equivalente a medio grano de arroz crudo. Si hay presencia de molares entonces se usa la cantidad equivalente a un grano de arroz crudo y debe contener flúor en una concentración mínima de mil partes por millón (información presente en la pasta). Idealmente el cepillado debe ser en seco para aprovechar al máximo el efecto del flúor", aconseja.En la primera visita médica es normal que los niños lloren, pero no será un llanto de dolor, detalla Maritza, "esta visita va disipando temores por ello debe ser temprana y especialmente si los padres tuvieron experiencias negativas deben procurar no transmitir ese temor. También deben evitar amenazar con el dentista como: 'si no te portas bien irás al odontólogo', porque esta visita no es por castigo sino...