Together

Hansel GudielAbogadoCircula un video en redes dando la noticia de la reelección del mero mero, algunas personas se alegraron porque les van a regalar otras trescientas bolas electoreras nuevamente, dicen que suban la cuota, no les alcanzó la vez pasada, porque esta es segunda vez y las cosas están más caras, pero los más felices fueron los que están becados con esos suculentos salarios: aplaudían, saltaban emocionados, no era nada cuando celebramos un gol de la selección, un caso peculiar fue un señor barbudito que dicen que tiene un buen cargo que empuñaba sus manos jubiloso y con ademanes de pugilista brincaba y el señor de la par convulsionaba de felicidad, me imagino que en sus mentes solo gravitaba un pensamiento: otros cinco años más de beca.También comentan que posteriormente reventaron petardos y le entraron a las bebidas espirituosas, dicen que estaban bien alicorados, la ciudadanía también tiene sus servicios de inteligencia, no solo ustedes, y versiones no confidenciales circulaban en el ambiente popular no codificadas por la población que unos amanecieron en sus casas como que eran estrellas de mar, bien explayados, incluso como al día siguiente era vacación y después fin de semana otros le dieron galán al jarabe, continuaron con la zafra; otros fueron más recatados, solo totorecos se pusieron. Dicen que el mero mero es un tipo sobrio que después de la ovación se fue para la terraza a conectarse con las estrellas a pedirle inspiración al Universo para otros cinco años. La vida cómo es de injusta, el salvadoreño común salió a trabajar a la rebusca para el sustento de sus hijos, la persona que recibe remesa del hermano lejano bendito sea Dios la va pasando pero el que no recibe muchas veces anda como cordel de campanario, "bien...

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