15 años de MARTE, el Museo de Arte de El Salvador

Alberto Arene

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Lamentablemente el talento artístico se saltó mi existencia y la de mis hermanos, siendo bisnietos, nietos, hijos y sobrinos de ciudadanos dedicados al arte y la cultura. Nuestra niñez, adolescencia y temprana adultez la vivimos enfrente y adentro de la Galería Forma de Julia Díaz, después convertida en el Museo Forma considerado por la presidenta-fundadora de MARTE, María Marta de Regalado, "el antecedente de este gran esfuerzo". Antes, ella integró la junta directiva del Museo Mexicano de San Francisco, California, y del Patronato Pro-Cultura de El Salvador donde nació el sueño y se presentó el Proyecto de MARTE en 1998, comprometiéndose a impulsarlo y liderándolo durante casi dos décadas.

El 22 de mayo de la semana recién pasada se cumplieron 15 años de la inauguración del Museo de Arte de El Salvador (MARTE), el mayor y mejor museo de El Salvador y uno de los mejores de Centroamérica, acumulando ya más de medio millón de visitantes. Allí se guarda y expone permanentemente lo mejor de la obra de los más destacados artistas nacionales, y las exposiciones itinerantes y temporales de consagrados maestros del arte universal. Abierto a todo el público, MARTE ha formado a cientos de docentes de escuelas e institutos públicos que introducen y acompañan a miles de sus estudiantes que lo han visitado con transporte y refrigerio incluido.

Todo comenzó así: Rina Avilés, del Patronato Pro-Cultura, le solicitó el terreno detrás del monumento a la Revolución al entonces presidente Calderón Sol quien respaldó la iniciativa con la Asamblea Legislativa que lo entregó en comodato durante 99 años a la Asociación Museo de Arte de El Salvador, constituida en el año 2000. Su presidenta-fundadora, su actual presidenta nieta del gran maestro Valero Lecha (Eli Lecha de Lindo), su secretaria (Lovey Argüello) y su director ejecutivo desde entonces (Roberto Galicia) visitaron los principales museos de México bajo CONACULTA, dirigido por Sari Bermúdez, gran amiga de María Marta. Luego vino el diseño y la...