El arte tachista de Óscar Portillo

José Carlos MolinaApasionado, comprometido con su arte y exigente consigo mismo, así es Óscar Humberto Portillo Mejía, un artista plástico y diseñador gráfico salvadoreño, de 27 años. Estudió en la Universidad Francisco Gavidia (UFG), donde obtuvo su título de Licenciatura en diseño gráfico publicitario."No sé con exactitud cuándo comenzó esta aventura llamada arte, pero sí ha llevado muchos procesos. Durante varios años en mi época de colegio, dibujaba y pintaba con materiales básicos, con pinceles y témperas. Fue a finales del año 2008 (13 años) cuando decido comenzar a crear formatos más grandes, salir del papel y comenzar a pintar en tela", contó el artista en entrevista con LA PRENSA GRÁFICA.En cuanto a su preparación, Óscar asegura haberse formado como profesional acompañado siempre del arte. "Recibí clases de dibujo y pintura en el Centro Nacional de Artes (CENAR), talleres y clases de diferentes artistas, junto con la práctica que día con día llevo", asegura.Como artista plástico, el arte de Óscar Portillo está influenciado principalmente por el informalismo y el tachismo, movimientos artísticos que se desarrollaron ampliamente en Francia y el resto de Europa en los años 40 y 50."Comencé a estudiar la historia del arte, el diseño y los movimientos artísticos. Entonces descubrí nuevas formas compositivas de trabajar y un sinfín de materiales que adapté para crear como tornillos, clavos, palitos de árboles, e incluso poder pintar con los dedos", destaca.Portillo ha perfeccionado su técnica a través de un sketchbook, un cuaderno en el que plasma dibujos caligráficos y pinceladas espontáneas, goteos y manchas de pintura. "Hoy en día camino por las calles con mi cuaderno y mis utensilios esperando cruzarme con un paisaje para retratar", señala el joven artista."Esta forma de dibujar la traslado a la pintura en donde creo distintas representaciones ocupando muchas texturas, objetos incrustados al lienzo, borrones y colores...