Exfuncionarios Saca revelan el esquema para desvío de fondos

Ricardo FloresCuatro exfuncionarios de la administración Saca le contaron ayer a los tres jueces del Tribunal Segundo de Sentencia de San Salvador el esquema que utilizaron para el desvío de fondos públicos hacia cuentas privadas, para beneficiarse y favorecer a terceros con el desvío de $301 millones. La revelación fue parte del trato que hicieron con la Fiscalía para confesar los delitos de peculado (mal uso de fondos) y lavado de dinero a cambio de recibir una pena menor.El primero en confesar fue Élmer Charlaix, ex secretario privado del expresidente de la república Elías Antonio Saca. Eran las 11:40 de la mañana cuando tomó el micrófono y contó que desde el 1.° de junio de 2004, el expresidente creó un nuevo reglamento que permitía el "manejo discrecional de fondos públicos de los Gastos Reservados de la Presidencia".Dijo, además, que Saca lo nombró a él coordinador general de esos fondos secretos vinculados también al Organismo de Inteligencia del Estado (OIE). Para ello, recibió órdenes del expresidente de abrir dos cuentas bancarias con la idea de "disponer de forma inmediata" de esos recursos.El nuevo reglamento, según Charlaix, les permitió abrir cuentas bancarias a nombre de personas particulares, algo prohibido en el procedimiento contable de la Presidencia de la República.El ex secretario privado contó que cumplió la orden y abrió dos cuentas bancarias: la primera el 3 de junio de 2004; pero no le dijo al banco privado que estaban vinculadas a la Presidencia; sino declaró que serían alimentadas por capital de trabajo por unos $70,000 mensuales. El 27 de septiembre de ese mismo año habilitó una segunda cuenta bancaria con la misma excusa que la primera: ocultar el origen de los fondos públicos.Sin embargo, el expresidente decidió cambiar el esquema de desvío de fondos. Según Charlaix: "Se modificó la metodología para desvanecer el rastro"; y en agosto de 2005, Saca y Charlaix acordaron abrir nuevas cuentas, siempre a nombre de privados, pero con el argumento de que serían utilizadas para "gastos operativos de la Presidencia": 14 cuentas bancarias fueron abiertas por Francisco Arteaga, exjefe de la Unidad Financiera de Casa Presidencial; y dos más por Pablo Gómez, exasesor contable.Esas nuevas cuentas bancarias, de acuerdo con la declaración de Charlaix, no fueron autorizadas por Tesorería del Ministerio de Hacienda. Además, confesó que no eran auditadas por la Corte de Cuentas de la República ni por los controles internos...