Maestro emprendedor y amante de las abejas

Ricardo Bracamontelrbracamonte@hotmail.comSaúl Guirola, profesor de Biología y Química, vive fascinado por el invaluable aporte que las abejas (la especie Apis mellifica) generosamente dan a la humanidad y al planeta entero.Después de escuchar y leer la descripción ordenada y sus conclusiones sobre la maravillosa labor de este pequeño insecto, nadie dudaría en formar un movimiento nacional para protegerla y luchar en contra de la proliferación de pesticidas y de la destrucción de la flora que gradualmente acaban con su hábitat.Nos dan miel, cera, propóleo, jalea real y hasta apitoxina (veneno) para preparar medicamentos. Además, la humanidad debería estar muy agradecida con la Apis mellífica ya que posibilitan el paso del polen a los órganos reproductores de las flores para la formación de frutos y semillas (polinización). En el planeta, alrededor de un 35 % de frutos se produce a través de este mecanismo, explica.El profesor Guirola llegó a la apicultura cuando se dio cuenta de la insuficiente jubilación de maestro; ahora, forma parte de una cooperativa que exporta miel a Europa; lo que le ha permitido convertirse en un fiel defensor de esta especie de abejas "previsoras, sociables, muy organizadas, trabajadoras incansables y altamente solidarias"."Ya quisiéramos políticos con esas características en el país" -bromea el maestro- y agrega: "Las abejas Obreras saben cuándo es necesario reemplazar a la abeja Reina por defectuosa y ceder el espacio a otra nueva". Los zánganos, dice, de aspecto tosco, incapaces de buscar alimento, solo esperan afuera del panal para fecundar a la Reina; mientras las Obreras se multiplican en Nodrizas (limpian y alimentan a la Reina), Carpinteras (fabrican cera para construir y...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR