Mejorar la calidad de vida

Óscar Manuel Batres B.Una de las manifestaciones más significativas es la elevada congestión vial a todas horas.La función principal de un gobierno es estimular el funcionamiento de la sociedad y desempeñar el papel subsidiario que le corresponde para crear las condiciones que mejoren la calidad de vida de sus ciudadanos, y se aseguren de tener los medios con los cuales puedan tener mejores niveles de bienestar y condiciones para desarrollarse y prosperar. Los diferentes segmentos de la población y sectores de la sociedad tienen diversas necesidades, pero lo primordial es que tengan los medios de vida para satisfacer sus necesidades básicas y sus expectativas de mejorar sus condiciones de vida y las de su familia. A medida que la población va escalando y mejorando sus niveles de vida, las necesidades y aspiraciones también van cambiando, y por eso es importante que el ejercicio de un buen gobierno contemple no solamente las necesidades inmediatas sino las que la población, y toda la sociedad, tendrá a mediano y largo plazo.Al revisar nuestra historia más reciente debemos observar y reconocer los notables avances que tuvimos en la segunda mitad del siglo pasado para asegurar a la población mejores niveles de vida y condiciones de desarrollo. Recordamos programas como la electrificación rural que se realizó entre los sesenta y setenta para que toda la población tuviera luz eléctrica en sus viviendas; programas de gobierno que se propusieron y realizaron en los setenta una Escuela por día y, posteriormente, y en la misma época, una cancha por semana, y los planes que extendieron los programas de salud a todo el país mediante hospitales regionales y unidades de salud; tampoco debemos olvidar las grandes obras de infraestructura que se realizaron para fomentar el desarrollo de las actividades productivas, estimular un mayor dinamismo en la economía y estimular la generación de mejores empleos y oportunidades para toda la población.Los conflictos sociales que tuvimos en los setenta y que desembocaron en la guerra que sufrimos en los ochenta, y los alarmantes niveles de corrupción, mediocridad e improvisación que venimos padeciendo desde el inicio del milenio detuvieron aquellos grandes avances, y en los años más...