Rutilio Grande, el guía de las comunidades rurales

Angélica RamírezAl padre jesuita Rutilio Grande, asesinado el 12 de marzo de 1977, se le conoce por su trabajo con las comunidades rurales, a quienes evangelizaba y enseñaba sus derechos, en medio de la represión de la antesala de la guerra salvadoreña (1980-1992).El asesinato del padre Tilo, como lo conocía la gente, fue declarado por el Vaticano como un martirio por odio a la fe y con esto se abrió el camino hacia su beatificación, que se concretará mañana, 22 de enero, en la Plaza Salvador del Mundo, en la capital salvadoreña. Subirá a los altares junto a sus compañeros de martirio, Manuel Solórzano y Nelson Rutilio Lemus. También será beatificado el fray Cosme Spessotto, asesinado en 1980.El jesuita fue asesinado por hombres armados, vinculados a la Guardia Nacional, junto con Manuel (72 años), Nelson (16 años).Se dirigían a celebrar la eucaristía en honor a San José, en El Paisnal. A las 5:45 de la tarde, transitaban por la calle que une el Cantón El Paisnal con Aguilares. Los esperaban hombres armados, apostados a ambos lados de la carretera, quienes abrieron fuego contra el vehículo a la altura del cantón Los Mangos.Monseñor Rafael Urrutia, canciller del Arzobispado de San Salvador y vicepostulador diocesano de la causa de beatificación del padre Grande, sitúa en 1970 la primera de las homilías que ocasionaron, siete años más tarde, el martirio del jesuita.El 6 de agosto, consigna Urrutia en una breve biografía que escribió del futuro beato, instó a la iglesia y al gobierno, cada uno desde su campo de acción, "a ver con los ojos de Cristo" y a cambiar la realidad que vivía El Salvador en ese momento."La iglesia dentro de su esfera y el gobierno en la suya propia; con el mutuo respeto dentro de sus ámbitos legítimos, han de colaborar eficazmente, audazmente y urgentemente a fin de propiciar leyes justas, honestas y convenientes, según lo exige la soberanía del pueblo en el artículo 1 de nuestra Constitución", les dijo en esa homilía. "¿Cuál es ese pueblo soberano? ¿La gran mayoría o la pequeña minoría? ¿Cuál de los dos es realmente alienado en esta nación? La iglesia y el gobierno han de colaborar eficazmente, audazmente y urgentemente para transformar al pueblo salvadoreño que vive en los valles, juntos a los hermosos lagos, junto al río Lempa, a la orilla de los cafetales y cañales en flor, en las faldas de nuestros montes y volcanes, en los pueblitos y caseríos y en las grandes y explosivas concentraciones urbanas y junto a los...

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